Salsa Roquefort con Leche

Receta de Salsa Roquefort con Leche

Vamos ahora con una variante de la receta de salsa de roquefort que vamos a preparar cambiando la nata que se suele emplear por leche, para hacerla más ligera de calorías. El resultado de esta salsa de roquefort con leche es muy interesante.

Preparación de Salsa Roquefort con Leche:

Lo más habitual es preparar la salsa roquefort empleando nata como base de la salsa, pero en esta ocasión os mostramos una receta con la que hacer la misma salsa empleando leche en sustitución de la nata. Con este cambio se consigue una salsa más ligera en calorías y además una salsa algo meno espesa, por lo que resulta ideal para servirla como acompañamiento de platos que requieran una salsa menos densa y más bien líquida, aunque podemos darle mayor o menor cuerpo según necesitemos. Vamos ya con la receta.

Comenzaremos a preparar la salsa roquefort con leche poniendo a calentar un cazo de tamaño adecuado para la cantidad que vamos a preparar, en el que colocaremos la mantequilla y esperamos a que se derrita del todo, lo que resulta mejor hacerlo a fuego medio-suave, para que no se queme la misma. Una vez se haya derretido agregamos la harina y la mezclamos bien con la mantequilla hasta que no queden grumos, y mantenemos uno o dos minutos para que la harina se cocine, sin dejar de remover.

Tras esto agregamos la leche al cazo y también el queso roquefort troceado, para que se funda más fácilmente. Si quieres puedes darle un toque de nuez moscada, que le da un sabor interesante, pero esto es opcional. Subimos la intensidad del fuego a potencia media y sin dejar de remover vamos a esperar a que todos los ingredientes se mezclen y se forme una salsa homogénea. Cuando comience a hervir la salsa apartamos el cazo del fuego inmediatamente.

Hay que tener en cuenta que a medida se vaya enfriando, la salsa irá espesando un poco más, pero si necesitas conseguir una salsa más o menos densa puedes ir agregando más leche o bien algo más de roquefort, para dejarla a tu gusto. Otra forma de espesarla es añadir más harina en el primer paso, tenlo en cuenta por si la repites en más ocasiones. Se puede servir en caliente esta salsa roquefort con leche, para acompañar platos de carne o patatas fritas, por ejemplo, o bien dejarla enfriar en la nevera tras haberla templado antes a temperatura ambiente, para servirla en frío si lo prefieres.

Raciones / Unidades: 1
Tiempo Aproximado de Preparación: 30M
Calorías Aproximadas: 90